En los primeros meses y años de vida, los bebés descubren el mundo a través de experiencias con sus padres y otras personas que los cuidan. Este momento crucial en la vida de un niño es una oportunidad única en la que los padres deben atender no sólo a las necesidades físicas – vacunación, lactancia materna y nutrición– sino también a las necesidades de interacción, armonización y apego.

¿Qué es el apego?

Es el lazo afectivo fuerte que sentimos por personas especiales en nuestra vida que cuando nos relacionamos con ellas nos lleva a sentir placer y alegría; y alivio en situaciones de estrés.

¿Cómo se desarrolla el apego?

Los bebés tienen incorporadas una variedad de conductas internas (agarrar, sonreír, llorar y mirar a los ojos del adulto) que ayudan a establecer contacto con quienes los cuidan. Los bebés establecen apego con diferentes personas conocidas, no sólo madres y padres, sino también hermanos, abuelos, cuidadores y niñeras.

En los primeros meses de vida el bebé establece múltiples contactos para “señalar” a sus padres o cuidadores que tiene un malestar o que necesita algo. Habitualmente usan el llanto como señal y poco a poco los padres van comprendiendo lo que quiere decir y las acciones más adecuadas para responder a lo que necesita.

A partir de los 6 meses de vida, el bebé está apegados a personas conocidas que han respondido a su necesidad de cuidado físico y ha aprendido la manera en la que esas personas suelen responder a sus señales de malestar. En esta etapa comienza a mostrar angustia y llanto cuando el adulto en quien han llegado a confiar se marcha, mostrando su ansiedad ante la separación.

Entre los 6 y los 18 meses utilizan a la figura de apego, generalmente la madre, como base segura desde la cual explorar el ambiente. El bebé explora y aprende cuando se siente tranquilo y seguro, y se refugia en sus padres o cuidadores cuando se siente asustado, triste o enojado. Una vez que se sintió contenido y acogido por ellos puede salir a explorar nuevamente.

Ya a partir de los 18 meses, el niño comprende que la madre va a regresar y protesta menos por la  separación.

 ¿Cómo apoyar los sentimientos de confianza?

Responder rápidamente a las señales del niño, expresar emociones positivas y tomar al niño con ternura y cuidado, ayuda a construir un sentido de confianza en que sus padres lo cuidarán y protegerán siempre que lo necesite.

Comité Crecimiento y Desarrollo